ANATOMÍA
Los gatos poseen muchas
características físicas extraordinarias. El diseño de sus ojos les permite
captar y almacenar luces tenues, brindándoles una ventaja visual en situaciones
de escasa luz. Ellos perciben un campo visual amplio y tienen habilidad estereoscópica
para ver en tres dimensiones. Los gatos tienen una mayor sensibilidad olfativa
que los humanos. Tienen un gusto discriminativo y exigente. Sus poderosas
mandíbulas y largos colmillos les ayudan a cortar y desmenuzar la carne. Los
bigotes alrededor de la boca continúan siendo un misterio científico, pero
probablemente ayudan a la navegación en ambientes oscuros. Los gatos pueden
localizar los sonidos tan bien como los humanos pero detectan frecuencias
mucho más altas. Los gatos están hechos para movilizarse en distancias cortas.
Aunque les falta resistencia, poseen una gran aceleración y velocidad. La
mayoría de felinos pueden trepar y saltar con agilidad y se ayudan con sus
poderosas y afiladas garras. Los gatos son bien conocidos por su increíble
equilibrio, poseen un reflejo "derecho" único. Combinan unas respuestas de
rápida acción, estabilizando la cola y la sensibilidad del oído interno para
orientar correctamente su cuerpo en caída libre y evitar graves daños.
COLOR
DEL PELO
Las interacciones hereditarias complejas crean una amplia variedad de colores
y marcas que distinguen el pelo de los felinos. Estos patrones se dividen
en siete clases básicas: Sólido, sombreado, particolor, punteado, moteado,
rayado y manchado. Los sólidos tienen una pinta de color desde la raíz del
pelo hasta la punta. Los colores más comunes son negro, blanco, crema, café,
chocolate, rojo y lavanda/lila. Los gatos sombreados tienen una capa sencilla
que varía desde una sombra ligera en la capa interna a una sombra oscura en
las puntas. Los colores más comunes son negro, azul, rojo, plateado, dorado
y carey.
Los
gatos particolores combinan dos o más patrones diferentes de color, preferiblemente
con una ligera iluminación en la cara. Pueden mezclar sólidos o patrones complejos
tales como Calicó y carey. El calicó mezcla el carey con el blanco, mientras
que el carey es una mezcla en mosaico de negro y anaranjado. Los bicolores
siempre combinan el blanco con un color sólido. Los gatos punteados (o restringidos
de puntos) tienen un color de pelo claro y las puntas oscuras en la cara,
oídos, patas, pies y cola. Cualquier combinación de claro a oscuro normalmente
asociadas al pelo de los gatos se puede desplegar.
Los
gatos sufren de una variedad de enfermedades que varían desde leves hasta
mortales. Las enfermedades más graves se pueden prevenir con una programación
regular de vacunas. La vacunación se debe comenzar cuando el gatito tenga
seis semanas de edad y se debe programar junto con el veterinario. Se deben
colocar los refuerzos anualmente para prolongar la inmunidad.
A
pesar de que la mayoría de enfermedades peligrosas no se pueden tratar después
de contraídas, las vacunas representan el único método y el más seguro de
proteger la salud de su gato. A pesar de todos sus esfuerzos, los gatos pueden
contraer una enfermedad o infección. Puesto que la mayoría de enfermedades
se pueden transmitir rápidamente o afectar a los humanos, contacte su veterinario
a la primera señal de enfermedad o comportamiento inusual. La
rabia, la panleucopenia y enfermedades respiratorias como la rinotraqueitis
y el calicivirus representan los más serios peligros.
Los
gatos también pueden sufrir de enfermedades graves que no puedan prevenirse
con vacunas. Las más graves son la leucemia felina y el virus de inmunuodeficiencia
felina. Algunas infecciones por parásitos internos y externos también pueden
afectar a su gato. Las infecciones intestinales, incluyendo Toxoplasma, Giardia
y Coccidia, ocasionan diarrea y se pueden transmitir a los humanos. Un ambiente
higiénico, una alimentación saludable y visitar con frecuencia al veterinario
le permitirán mantener a su gato en un buen estado de salud.
HIGIENE
Si
los gatos son descuidados o viven en condiciones de suciedad, pueden ser
fácilmente infectados por parásitos tales como gusanos, garrapatas, pulgas
o piojos. El tratamiento contra estas infecciones lo debe diagnosticar el
veterinario. Tú debes colaborar manteniendo limpia su cama, cobijo y alrededores.
Los
gatos que gozan de buena salud tienen un pelo lustroso, una mirada clara y
la nariz está libre de mucosidades. Las orejas deben estar limpias de suciedad
e infecciones. Los dientes deben ser fuertes y blancos, no descoloridos. Si
las encías infectadas se dejan sin tratar, los dientes se pueden caer, lo
cual les dificultará el poder comer.
VACUNAS
Los
gatos son vulnerables a muchas enfermedades que pueden ser peligrosas y
difíciles de tratar. La mejor manera de proteger a tu gato es a través de
vacunas. No solamente ayudan a prevenir las enfermedades, sino que dan mejor
resultado (costo-efectividad) a largo plazo reduciendo el riesgo de contagio
a otros gatos.